Saturday, March 23, 2013

Fashion Sisters: Princesses du Skate (Dani + Pau Part One)

























Daniela usa: Vestido MMM x H&M, Collar MMM x H&M, Zapatos de Uterqüe y chamarra de cuero de Zara.
Paulina usa: Camisa, falda y short de American Apparel, collar de MMM x H&M y zapatos de Zara.

//

Dani is wearing: a Maison Martin Margiela x H&M Lining dress(Re-edition of the Autumn-Winter 1992/1993 collection), a Maison Martin Margiela x H&M Rhinestone necklace(Re-edition of the Spring-Summer 2004 collection), Uterqüe pumps and a Zara leather jacket. 
Paulina is wearing: Chiffon oversized Button-Up shirt in bone, Chiffon Full Length skirt in black, and Cotton Spandex Jersey High-Waist Hot Short in black, all from American Apparel, Maison Martin Margiela x H&M Hair lock necklace (Re-edition of the Spring-Summer 1995 collection), and Zara shoes.

Fotografía y estilismo // Photo and styling: Liliana P


Las hermanas en el mundo de la moda están por todos lados. Poppy y Cara Delevigne, las hermanas Clarins, Mary Kate y Ashley, Elle y Dakota Fanning, Charlotte Gainsbourg y Lou Doillon, Bianca y Coco Brandolini, la lista es interminable. Y tiene sentido, cuando piensas en ello. Mismos genes, mismo contexto social, mismos valores educativos, ¿mismos vicios? Pongamos mi propio ejemplo. Soy la más pequeña de 4 hermanos, tres mujeres y un hombre. Desde que puedo recordar, estuve en contacto con revistas de moda, desde Teen Vogue hasta Harper's Bazaar y Vogue. Creciendo, pedía prestada ropa a mis hermanas para ir a fiestas, para salir con amigas, o incluso sólo para impresionar en mi escuela. Recuerdo una ocasión en la que tomé prestada ropa de mi hermana y mientras me preparaba para salir, luciendo algo pretenciosa, mi padre me dijo con un tono burlón: "¿Sí sabes que eres pobre, verdad?". Lo volteé a ver y le respondí: "Sí, pero no lo parezco". Ambos explotamos de risa. Supongo que en ese momento, la moda significaba para mí una manera de pertenecer, de sentirme lo suficientemente "cool" o "a la moda" para ser parte del club. Más tarde, descubrí que era algo mucho más profundo; que a través de la moda podías expresar tu ser interno, tu sentido de la estética y tu propia comprensión del estilo. Y crecer con dos hermanas diametralmente opuestas me hizo consciente de esto. Tener hermanas significa tener 2, a veces 3 guardarropas a tu alcance, de donde poder escoger. Fui extremadamente afortunada. Y la cosa es que la ropa nunca se veía realmente igual en ninguna de nosotras. Es la manera en que te adueñas de la ropa, la manera en que la combinas, la manera en que te peinas y te maquillas, incluso la manera en que te mueves y hablas, la que eventualmente le da un espíritu a la ropa.

Para inaugurar la sección de "Fashion Sisters", escogí a dos hermosas damiselas, que conozco desde hace un buen rato. Cuando conocí a Dani, las dos éramos nuevas en la secundaria, y enseguida congeniamos. Fuimos mejores amigas durante todos mis años de adolescencia, y ahora que estoy de vuelta en la ciudad estamos recuperando el tiempo perdido. Su hermana Pau tenía seis años cuando la conocí. Era la cosa más tierna que jamás podrías imaginar. Y ahora...bueno, ha crecido. Las dos tienen estilos muy diferentes, y físicamente también son bastante diferentes, y sin embargo su parentesco es más que evidente. Las dos tienen estilos diferentes, pero están cortadas con la misma tijera. ¡Y qué suerte la de poder tener 2 guardarropas en vez de uno! Todavía viven juntas y son de la misma talla...

Continuará...
//

Sisters in fashion are everywhere. Poppy and Cara Delevigne, the Clarins sisters, Mary Kate and Ashley, Elle and Dakota Fanning, Charlotte Gainsbourg and Lou Doillon, Bianca and Coco Brandolini, the list could go on forever. It does makes sense, if you think about it. Same genes, same social background, same educational values, same vices? Let's put my own example. I'm the youngest of four siblings, three females and a male. From the time I could remember, I got in touch with fashions magazines, from Teen Vogue to Harper's Bazaar and Vogue. Growing up, I would borrow my sisters' clothes for parties, to hang out with friends, or even just to wow people at my school. I remember that one time when I borrowed my sisters' clothes and whilst I was getting ready to go, looking kind of pretentious, my father told me, mockingly: You know that you are poor, don't you? I stared at him and I answered: "I know, but I don't look poor". We both burst out laughing. I guess in that moment fashion meant for me a way to belong, to feel "cool" or "hip" enough to be part of the gang. Eventually, I discovered that it was something much more profound; that through fashion you could express so many things about your inner self, your sense of aesthetics and your own comprehension of style. And growing up with my two very different siblings made me aware of that. Having sisters means having 2, sometimes 3, wardrobes from where to dig from. I was extremely lucky. And the thing is, clothes never looked quite the same on any of us. It's the way you own the clothes, the way you put them together, the way you style your hair and make up, and even the way you walk and talk, that eventually gives the clothes a spirit.

To inaugurate my "Fashion Sisters" section, I chose two beautiful ladies I've known for quite a while. When I met Dani, we were in 7th grade, we were both newcomers at junior high, and we immediately made a click. We were best friends for all my teenage years, and now that I've come back town we're making up for the lost time. Her sister, Pau, was six years old when I first met her. She was the cutest thing you'll ever see. And now, well, she's kind of grown up. Both have different styles, and physically look quite different, and despite all, their kinship is more than evident. They both have different styles, but they're cut from the same cloth. And what a lucky thing to have 2 wardrobes instead of one, since they're still living together and  wearing the same size!

To be continued...

Sound and Vision: Hannah bailando sola




Con este post, inauguro una nueva sección del blog, Sound and Vision (Sonido y Visión). En esta sección, compartiré algunos de mis momentos favoritos en cine y televisión, esos momentos en donde la música ayuda a expresar algo más allá de las palabras, un estado del alma, y que nos hace asociar por siempre la canción que escuchamos con la escena que vemos. Creo que no podría expresarlo mejor que Tarantino, uno de los cineastas más talentosos, en especial en cuanto a la elección de la música para sus películas. En su opinión: "una de las cosas acerca de la música en las películas que es como taaan cool, es el hecho de que cuando lo haces bien, cuando usas la canción correcta en la escena correcta [...] se trata de la cosa más cinemática que puedes hacer, en verdad estás haciendo algo que las películas hacen mejor que cualquier otra forma de arte. Realmente funciona de esta manera cinemática tan visceral y emocional que es taaan especial, es simplemente muy muy especial. Y cuando lo haces bien, y le das en el blanco, entonces el efecto es que nunca puedes realmente oír esa canción de nuevo sin pensar de cierta manera en esa imagen de la película".

Y bueno, como en este momento tengo una obsesión bastante malsana con la serie Girls, decidí empezar comentando la escena final del episodio 3, temporada 1, "Todas las chicas aventureras lo hacen". 
Hannah está tocando fondo. Acaba de ser diagnosticada con VPH aun cuando sólo ha tenido dos parejas sexuales en su vida, y a pesar de usar siempre condones pues, como nos ha dicho con anterioridad, sufre de una fobia al VIH relacionada con Forrest Gump. Más tarde, decide ir a enfrentar a su ex, sólo para enterarse de que ha salido del clóset. Llega a casa completamente herida en su ego, y quiere expresar lo que siente a través de su cuenta de twitter. Primero escribe: "Mi vida ha sido una completa mentira, my ex novio sale con un chico". Pero pronto se da cuenta de que esto es demasiado revelador. Y entonces, algo en su humor cambia. Recuerda la discusión que ha tenido antes con Shosh, una de la chicas de Girls, en la que le dice que Jessa también ha sido diagnosticada con el virus, y su única reacción ha sido "le sucede a todas las chicas aventureras". De repente, la música cambia y empieza a sonar "Dancing on my own" de Robyn. Hannah twittea "Todas las chicas aventureras lo hacen" y comienza a bailar sola, recordando que aun cuando la vida es dura, sigue estando joven y viva. Marnie regresa a casa de una fiesta y encuentra a Hannah bailando, lo que la hace sonreír. Las dos comienzan a bailar, y, sin decir nada, nos transmiten ese espíritu de amistad que es mi opinión,todo lo que Girls encarna o debería encarnar. 

Si no has visto la escena o no la recuerdas, dale un segundo vistazo:

Mándame todas tus propuestas para la sección Sound and Vision, ¡estoy más que dispuesta a que ésta se convierta en una parte interactiva del blog!





//

With this post, I'm inaugurating a new section of the blog, Sound and Vision. In this section, I will share some of my favorite moments in cinema and television, those moments where music helps express something beyond words, a state of the soul, and makes us associate forever the song that we're hearing with the scene that we're watching. I guess I couldn't say it better than Tarantino, one of the most talented cinematographers, especially when it comes to the choice of his movie soundtracks. In his opinion:
“one of the things about using music in movies that is like soo cool, it’s the fact that if you do it right, if you use the right song, in the right scene [...] it’s about as cinematic a thing as you can do, you really do what movies do better than any other art form. It really works in this visceral, emotional, cinematic way that’s just like special, it’s just really really special. And when you do it right, and you hit it right, then the effect is you can never really hear that song again without kind of thinking about that image from the movies.”
So, since right now I have a quite unhealthy obsession with the TV show Girls', I decided to start by commenting the final scene of Season 1, Episode 3 "All adventurous women do".
Hannah is hitting bottom. She's just being diagnosed with HPV virus even if she's only had two sexual partners in her life, and even though she has been using condoms regularly since, as she has told us previously, suffers from a Forrest Gump-related HIV phobia. Later on, she decides to go face her latest ex, just to learn that he's gotten out of the closet. She arrives home completely ego-wounded, and she wants to express the way she's feeling through her twitter account. First she writes "My life has been a complete lie, my ex dates a guy". But she soon realizes that's way too revealing. And then, something in her mood changes. She remembers her discussion early on with one of the Girls' girls, Shosh, telling her Jessa's been diagnosed HPV as well, and she's reacted only by telling "All adventurous women do". Suddenly, the playlist changes and Dancing on my own by Robyn starts playing. Hannah tweets "All adventurous women do" and starts dancing on her own, remembering that even if life's tough, she's still young and alive. Marnie comes home from a party just to walk into Hannah dancing, which makes her giggle. They both start dancing, and without saying anything, you feel all the spirit of friendship that is to my opinion, what Girls is, or should be, all about.
If you haven't seen the scene or you just don't remember it, take a second look:


Send me all your proposals for the Sound and Vision section, I'm more than willing to make this an interactive part of the blog!

Sunday, March 3, 2013

Youth Knows No Pain / La Jeunesse Connaît Pas La Douleur























Nahevy: 1er outfit: Camisa, sombrero y lentes, vintage. Botas, Massimo Dutti. Cinturón, Armani.
2do outfit: Parka, Kenneth Cole. T-shirt y pantalones de Zara. Botines de Giuseppe Zanotti Design.
Lili: 1er outfit: T-shirt Jane Birkin, Zara. Jeans, American Apparel. Zapatillas, Massimo Dutti.
2do outfit: T-shirt Jane Birkin, Zara. Falda, Pull&Bear. Chaqueta, Bimba&Lola. Botas, Maison Martin Margiela. Bolso, Tory Burch.


Para esta colaboración con mi queridísima amiga Nahevy Estrada, quise hacer algo inspirado en la década de los sesenta. Nahevy tiene un estilo personal que me encanta. Nos conocemos desde la secundaria, y aunque la vida nos llevó por caminos separados, siempre hemos conservado esa cercanía tan evidente que es la que se guarda con los amigos de verdad. En fin, su universo para mí está irremediablemente ligado a la música, y en especial con la de esta década, que representa a mis ojos una estética muy particular. Siempre he sido fan de los 60s, tanto a nivel cultural como social. Y qué mejor símbolo de la revolución cultural que tuvo lugar en esa época que el movimiento estudiantil del 68. En Francia, Mai 68 marcó un antes y un después en cuanto a la manera en que la sociedad, y el imaginario colectivo, percibía a la juventud. El movimiento estudiantil lucha contra un modelo paternalista de autoridad que ya no tiene legitimidad antes sus ojos: su lema será "La imaginación al poder", y ¿qué puede significar este lema sino la demanda de libertad y de autonomía para construir nuestra propia identidad? Los jóvenes del 68 marcaron un hito en la manera en la que la juventud hacía frente a la modernidad. La subversión, la rebeldía, si bien fueron considerados como algo negativo en su época, eran la única manera de romper con un modelo caduco de gobierno y de sociedad. Romper con lo establecido, a través de la moda, el arte, la literatura y la protesta social. Lamentablemente, muchos de estos jóvenes sufrieron de la represión y la violencia de un gobierno que no estaba preparado para cumplir con sus demandas. En México, en los años 60, y en palabras de Carlos Monsiváis, "todo es gobierno y casi nada es oposición". Hoy, a más de 40 años de la masacre de jóvenes estudiantes a manos de militares, sigue sin esclarecerse lo que realmente sucedió en la plaza de Tlatelolco, la plaza de las Tres Culturas. Sin embargo, la plaza habla por sí sola. Este lugar histórico, marcado por el sincretismo cultural, y símbolo del movimiento estudiantil, sigue poseyendo una energía vibrante y marcada por la historia. En este lugar emblemático decidimos ambientar nuestras fotos, un humilde tributo al espíritu de la juventud que conoce el dolor, pero que no se rinde ante él.

//

For this collaboration with my dearest friend, Nahevy Estrada, I wanted to do something inspired in the 60's decade. Nahevy has a personal style which I love. We know each other since junior high, and though life has taken us on separate paths, we've always kept this evident closeness that you keep only with true friends. And so, her universe is, in my opinion, irremediably linked to music, and to 60s music in particular, which represents a very particular aesthetics to me. I've always been a fan of this decade, culturally as much as socially. And what better symbol of the cultural revolution that took place during that period than the 68's student movement? In France, Mai 68 marked  a hiatus in the way on which society, and the collective imaginary, perceived youth. The students' movement fights against a paternalist model of authority that has no legitimity to their eyes: their motto will be "Imagination to power", and what could this motto possibly mean if not the demand of freedom and autonomy to build our own identity? The young from 68 marked a hiatus in the way on which youth faced modernity. Subversion, rebellion, even though considered as something negative during that time, were the only tools to break up with an obsolete model for government and society. To break up with what's been pre established, through fashion, art, literature and social protest. Unfortunately, many among these young students suffered repression and violence from the part of a government that wasn't prepared to satisfy their demands. In Mexico, in the 60's, and in the words of Carlos Monsiváis, "everything is government, and almost nothing is opposition". Today, more than 40 years after the massacre of young students in hands of the national army, the mystery has not been solved on what actually happened that day on the Tlatelolco square, the Three Cultures square. Nevertheless, the square speaks for itself. This historical place, marked by cultural syncretism, and a symbol of the students' movement, keeps possessing a vibrant energy and continues to be marked by its history. On this emblematic place is where we chose to set our photos, as a humble tribute to the spirit of the youth, who knows pain, but who doesn't surrender. 


Fotografía // Photography: Edgar Paredes
Estilismo // Styling: Liliana P